lunes, 10 de abril de 2017

De intereses gasísticos


El hipermediático Trump entendió perfectamente que necesitaba un gesto de fuerza para disipar el cerco mediático en casa promovido por los Demócratas de Obama-Clinton y agencias estatales a su servicio que le vincula a Rusia, y que tanto daño le está haciendo. Estratégicamente impecable. Y cuando se tiene delante el gusto por las armas químicas resulta más fácil. La desregulación financiera mortal que está llevando a cabo, en cambio, ha gozado de la complicidad de todos los medios para eclipsarla. Bueno, y que a él y a su hija les preocupan mucho los niños gaseados, como nos han contado los medios, típica sensibilidad de presidente de los EEUU, que ha bombardeado tantas veces a la Israel del fósforo blanco, por ejemplo.