De Profundis

Muere una mujer nicaragüense esperando durante horas en urgencias entre dolores la aparición mariana del capitalismo de rostro humano de pedernal.

En cuanto a Podemos no diré que no lo dije. Pero en realidad qué más da a estas alturas que podamos, una vez muerta tan miserablemente mi hermana.

Quizás no hemos comunicado bien, concluyen los portabocas Floriano, Hernando o Alonso: Aprendamos de Le Pen. 
Pons sigue sin entender que la gente se resista a los millones de empleos que suman sus intervenciones preelectorales.