¿Y para qué querrán en
España un ministro de Justicia?, bromean en la televisión norteamericana. Pues para lo mismo
que una Ministra de Trabajo, uno de Educación u otra de Sanidad.
La de Igualdad y Asuntos Sociales se desempeña entretanto
para que a Lucía Figar le paguen la beca de guardería entre todos los madrileños
a cuyos niños su normativa draconiana se la ha negado.
Pintorescas notas de color democrático, Mr. Marshall.
No hay comentarios:
Publicar un comentario